Una recetilla simplona para los que están aún en el estadío “recién emancipados, recién casados, o se acabó el chollo de mamá…” jejeje… 
Ponemos aceite abundante a calentar en sartén y freímos las patatas.
Cuando están doraditas, las saco y pongo sobre papel de cocina para que suelten algo de aceite.
Paso las patatas al plato o bandeja donde serviré el aperitivo y le añado por encima un poco de perejil al gusto.
Frío un par de huevos en el mismo aceite de preparar las patatas y los coloco sobre ellas. Un truco para potenciar el sabor del plato es añadirles un “golpe” de vinagre, sólo un chorrito…Este truco lo comparte en su blog de cocina Queca Morell…
Por último, revuelvo todo sin romper las patatas.
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